En la Casona de Xicoténcatl, la presidenta de la Mesa Directiva del Senado, Ana Lilia Rivera Rivera entregó reconocimientos al personal del Instituto Belisario Domínguez, destacando la gran e importante labor de los investigadores, administrativos, trabajadores de mantenimiento y apoyo técnico.
El personal del Instituto ha logrado sacar adelante la encomienda de realizar análisis e investigaciones que coadyuven en la toma de decisiones de las y los legisladores con respecto a las muy variadas Reformas que se debaten en el Pleno.
Por lo que su trabajo resulta de gran trascendencia al fungir como espectadores, otorgando a las y los senadores una perspectiva crítica y objetiva.
Al encabezar el acto en la Antigua Casona de Xicoténcatl, Ana Lilia Rivera Rivera reconoció que el IBD es “pieza angular” del quehacer legislativo, además de hogar de personas con enorme calidad académica y humana, cuyo trabajo hace que esta cámara “funcione y funcione muy bien”.
La colaboración de quienes ahí se desempeñan, añadió, va más allá de elaborar estudios y análisis, pues éstos han sido cruciales para acercar a la ciudadanía a los temas legislativos y fomentan una comprensión más profunda y accesible del trabajo del Senado de la República.
“Gracias a sus investigaciones estratégicas y capacidad para comunicar de manera efectiva, facilitan la toma de decisiones informadas y fundamentales, tanto para nosotras, nosotros, las y los legisladores, así como para la sociedad en general”, sostuvo.
Ana Lilia Rivera Rivera también consideró que el estudio, rigor, dedicación y sensibilidad humana del personal del IBD, permiten que el trabajo del Senado sea sólido, inclusivo y se base en evidencia, de tal manera que este instituto es ejemplo fuera de México e, incluso, se ha querido replicar en otros países por su eficiencia y pulcritud.
En ese sentido, la presidenta de la Mesa Directiva propuso mantener la independencia del Belisario Domínguez para producir análisis objetivos, fomentar una cultura de vinculación estrecha entre sus investigaciones y la toma de decisiones del Senado, y establecer, entre ambos, canales efectivos de colaboración y comunicación que impulsan las acciones legislativas.
“Ello implica un cambio de cultura institucional que no es fácil, pero que debe comenzar a aprobarse. Reconocemos que este es un desafío continuo, pero también confiamos en que con su dedicación y nuestro apoyo podremos lograrlo. Desde ahora les digo cuenten conmigo durante los años venideros para experimentarlo y promoverlo”, enfatizó.
En su intervención, el senador y presidente del IBD, Manuel Añorve Baños, reconoció el trabajo de Ana Lilia Rivera Rivera al frente de la Mesa Directiva de esta Cámara “siempre con firmeza, pero con amabilidad, entendiendo la pluralidad política que le tocó”, y celebró que, aunque ambos están por cerrar un ciclo en esta LXV Legislatura, comenzarán y compartirán uno nuevo en la próxima.
El legislador por el PRI también destacó los múltiples resultados del instituto, derivados de su trabajo, constancia, esfuerzo, dedicación, talento y disciplina, además de subrayar que el IBD “es su gente”, que a veces llega a trabajar horas extras, desvelarse o laborar los fines de semana, dedicación de tiempo y esfuerzo que sus familias recienten.
En la ceremonia de entrega, más de 70 trabajadores del Instituto Belisario Domínguez, entre investigadores, personal de mantenimiento y limpieza, administrativos y servicio técnico, recibieron un reconocimiento por su trayectoria, algunos por laborar en la institución más de cinco años, y otros por pertenecer a ésta más de tres décadas.
Karla Angélica Gómez McFarland, investigadora del IBD, enfatizó que la labor de cada persona en esta institución ha contribuido a que los análisis e investigaciones se realicen, las solicitudes de los senadores se respondan, que los debates y diálogos lleguen a buen puerto, y a que todos quienes ahí trabajan “sean el think tank” de la cámara alta”.
Agregó, en ese sentido, que cualquier institución adquiere fortaleza y reconocimiento gracias al talento humano, caso que no es diferente en el IBD, que ha evolucionado en casi 40 años gracias al trabajo conjunto de decenas de personas que hacen su mejor esfuerzo para apoyar la toma de decisiones legislativas.
Lourdes Guerrero, personal administrativo del IBD, con casi 35 años de servicio, agradeció la distinción a todo el personal que labora en el Instituto y no sólo a los investigadores, porque todos brindan, dijo, su mejor esfuerzo en sus respectivas responsabilidades, siempre con el fin de que el trabajo y compromiso se vea reflejado en el Senado de la República.
Aseguró que este reconocimiento es un incentivo y un aliciente para seguir dando lo mejor de ellos mismos, en beneficio del Instituto y del esta Cámara.
Reyna Contreras Lozano, personal de intendencia de Fonatur, destacó el gesto del senador Manuel Añorve y de la presidenta del Senado, Ana Lilia Rivera, porque en esta Cámara se les toma en cuenta para diversas actividades, además de que se les trata con respeto y se les apoya para que sus condiciones laborales sean más dignas.
“Agradezco el gran gesto que tuvieron con todos los compañeros y compañeras por asignarnos un espacio para utilizarlo como comedor digno. Nos comprometemos a cuidarlo y hacer buen uso de él, porque hasta hace poco tiempo comíamos en la azotea o en el estacionamiento”, expuso.

Alfil Nefro. – Este homenaje busca dar a conocer el trabajo de quienes no aparecen en escena, pero edifican todo lo que conlleva una película o una obra de teatro, afirma el senador Miguel Ángel Mancera
En el Senado de la República se entregaron reconocimientos a directores, productores y directores de casting de cine y teatro, por su destacada trayectoria y decidida labor en favor de la cultura y el arte en México.
El organizador del evento, senador Miguel Ángel Mancera Espinosa, destacó la importancia de que se reconozca desde esta cámara a quienes son portadores de mensajes importantes para el desarrollo de las y los mexicanos.
El coordinador parlamentario del PRD aseveró que este homenaje busca dar a conocer el trabajo de quienes no aparecen en escena ni frente a las pantallas, pero edifican todo lo que conlleva la creación de una película o una obra de teatro.
Subrayó que es necesario aumentar el presupuesto destinado a la cultura y las artes, algo por lo que esta Legislatura luchó, a pesar de que esas batallas no se conocieron, reveló el legislador; “la lucha fue férrea”, acotó.
A su vez, el senador Omar Obed Maceda Luna, del Grupo Parlamentario del PRD, afirmó que más que un reconocimiento, se trata de un agradecimiento a quienes se encargan de producir cine y teatro en nuestro país.
En tanto, el diputado Juan Carlos Romero Hicks, del PAN, enfatizó que el arte es una expresión de libertad y de creación, de ahí la importancia de restaurar una política de Estado que garantice el desarrollo de la cultura en nuestra nación.
Nicolás Celis, productor de cine y ganador de un Oscar por la película “Roma”, indicó que no es fácil ser un agente de la cultura en este país, pues por años no ha sido prioritario el arte y cada vez hay condiciones más adversas para realizar su labor.
El director de teatro Enrique Singer, aseguró que el teatro es un actividad sencilla, primitiva y esencial que llega a ser muy poderosa, por lo que definirlo como una ocupación elitista o un simple negocio es “la perversión de nuestro tiempo”.
En la ceremonia también participaron Jessica Edith Domínguez Aguilar, representante de las y los estudiantes de actuación; Samuel Sosa, presidente del Colegio de Productores; y Edgar Castillo, director de casting.
Las y los reconocidos fueron Gabriela Cartol, Natalia Bermúdez, Miguel Briones, Edgar Castillo, Analeine Cal y Mayor, Noé Santillán, Omar González, Luis Vizcaíno, Enrique Singer, Miguel Velázquez, Laura Jerkov y Alejandro Reza.
También, Valeria Lemus, Nicolás Celis, Sandra Dubszki, María Morett, Luly Garza, Miguel Sabido, Hanna Berumen, Alan Flores, Verónica Barba, Marco Polo Constandse Córdova, Antonio Aramburu, Yibrán Asuad y Emilie Morán.